El calor se impone. El follaje se sumerge por las ventanas y las lecturas esperan impacientemente. Los cortes de luz delatan la ausencia de inversión durante los ultimos años y no existe argumento que lo justifique. Las vacaciones y el trabajo procuran relacionarse en forma armónica. La mañana comienza con un apacible desayuno y se insinúa en consultas e informes por la tarde. La página de Tomás Abraham, las lecturas de Michel Foucault, constituyen pausas que enriquecen el alma y la curiosidad.
Dudo. Existo. Investigo. Procuro entender, comprender y más tarde comunicar una interpretación posible. Comienza Enero y con él mis ansias de escribir, leer, pensar, reflexionar en medio del parque, refugio de trinos. 13/01/2012